miércoles, 14 de octubre de 2009

OTROS ANIMALES EXTINTOS



Estos pingüinos habitaban de manera natural en colonias dispersas por todo el Atlántico Norte hasta el siglo XIX, cuando se extinguió. La última pare



A estos pingüinos también se les llama alca imperial, gran pingüino o simplemente pingüino, y es que estos son los verdaderos pingüinos. Posteriormente, los marineros y exploradores de los mares antárticos (en su mayor parte británicos, norteamericanos y escandinavos) comenzaron a llamar también pingüinos a las aves no voladoras del Hemisferio Sur (hasta entonces conocidas como pájaros o patos bobos), debido a su fuerte parecido externo fruto de la convergencia evolutiva. (Un ejemplo lo tenemos en el pingüino de penacho anaranjado (Eudyptes chrysolophus), un ave del hemisferio sur. Actualmente la gente utiliza casi indistintamente este nombre para las aves con similar parecido, aunque no sea lo más correcto.

Una diferencia podría ser que los pingüinos del hemisferio sur tienen las alas más adaptadas a nadar que las alcas, que conservan más la forma de alas de aves comunes. De hecho, aunque el alca gigante no podía volar, estando más adaptado al buceo, el alca común (Alca torda) sí que puede volar.


HISTORIA

Es sorprendente ver cómo las alcas pasaron de ser extraordinariamente abundantes a la extinción en relativamente poco tiempo. Según relató Jacques Cartier, en 1534 sus hombres mataron más de un millar de pingüinos norteños durante un solo día, en un lugar de la costa del continente americano. Además agregó que dejaron vivos suficientes animales como para llenar cuarenta botes. Otro capitán informó que sus hombres mataron dos barcadas de alcas gigantes en media hora solo con sus manos. Aquí tenemos un resumen de su camino a la extinción:


El problema de muchos animales aislados de depredadores es su falta de adaptación a la hora de tener que afrontar encuentros con nuevos enemigos, como fue el caso del alca o el del dodo (Raphus cucullatus) . Su incapacidad para volar y lo apetitoso de sus huevos y carne las hicieron unas presas perfectas ya en la prehistoria, como demuestran varios yacimientos paleolíticos. Llegó al punto de que a finales del siglo XVI el alca gigante ya había desaparecido de la Europa continental y en América del Norte sólo abundaba al norte de Nueva York. La situación se agravaba ya que como también ocurrió con el dodo o con la Tortuga Gigante de la Isla Pinta o Solitario Jorge (Geochelone nigra abingdoni), los marineros paraban a menudo durante sus viajes para aprovisionarse de su carne y, sobre todo, de sus huevos. Los naturalistas del siglo XVIII sin embargo no le encontraban tan buen sabor.

Fue además en este siglo cuando Linneo nombró la especie, inicialmente como Alca impennis, (alca sin alas), concretamente en 1758. Aunque ya con poblaciones algo diezmadas, el alca gigante era un animal sumamente raro en Europa, incluso en islas del Mar del Norte donde un siglo antes abundaba. De hecho, en 1790 se capturó un ejemplar en Kiel, lo que causó gran extrañeza por ser el único visto en el Mar Báltico en años. Hacia 1800, la especie ya se había extinguido en Norteamérica y su distribución se reducía a Islandia.

Sorprendentemente, en algunas zonas más aisladas seguían siendo abundantes en aquellas fechas, como por ejemplo ocurría en algunos lugares de Islandia, como en la isla de Geirfuglasker. Pero todo cambió cuando durante las Guerras Napoleónicas dos barcos arribaron allí en 1808 y 1813 (ésta última vez en plena época de nidificación) y capturaron cientos de aves y huevos. Para colmo, un terremoto hizo desaparecer la isla de Geirfuglasker bajo las aguas en 1830. Como consecuencia las aves que quedaban emigraron a otros lugares de Islandia donde no se habían visto en años, aunque fueron cazadas igualmente. La Isla de Eldey, cerca de la desaparecida Geirfuglasker, se convirtió en el hogar de las últimas parejas supervivientes.

Aun así, la respuesta no fue la de proteger a estas aves, si no que al contrario, al convertirse en un ave rara, los coleccionistas europeos pagaban cantidades cada vez más desorbitadas por hacerse con una piel o un ejemplar disecado. Hasta tal punto, que en 1840, los marineros de la zona informaron de que la población había desaparecido después de varias expediciones furtivas. Realmente los negociantes sólo tenían que seguir los pocos ejemplares que quedaban en la isla de Eldey. De aquí salieron unas 20 aves en 1830 y otras 24 en 1831. En 1833 fueron recogidas 13 aves y un huevo; en 1834, 9 aves y 8 huevos. Después de una corta pausa, en 1840 fueron capturadas 4 aves más y 5 ó 6 huevos. Luego, los pescadores informaron que no había quedado ninguna. Poco tiempo después, en 1844, Carl Siemsen, de Reykjavík, persuadió al pescador Vilhjalmur Hakonársson para realizar una última expedición a la isla, pues había oído que en Dinamarca ofrecían 100 coronas por un solo pellejo de alca gigante que pudieran encontrar. Hakonársson desembarcó en Eldey el 2 de junio junto con otros tres hombres, y dos días más tarde consiguieron divisar entre las gaviotas una sola pareja de alcas en su nido. Las mataron y ya no se volvió a tener noticia de ningún otro ejemplar vivo.

Tras su extinción las pocas pieles que quedaron recogidas entre los últimos años de la especie (1832 - 1842) se hicieron tan valiosas que se pagaron cantidades extraordinarias por ellas. Por ejemplo, en los últimos años antes de la primera guerra mundial alcanzaron unos precios que oscilaban entre los 120.000 y 200.000 dólares; tras su compra incluso llegaron a tener un valor incalculable, ya que sus nuevos poseedores se negaban a desprenderse de estas posesiones de ningún modo.

El afán por estas pieles llegó a tal punto que los taxidermistas expertos comenzaron a falsificarlas. Como ejemplo tenemos el Museo de Darmstadt (Alemania), que se enorgulleció durante muchos años de la posesión de un alca gigante disecad, hasta que tras un examen exhaustivo se descubrió que eran plumas de algunas variedades pequeñas de alca, en modo alguno raras y reunidas para constituir el alca gigante. Sólo el cráneo era genuino, de un ejemplar de la isla de Funk.

Actualmente varios museos de Europa y Estados Unidos conservan plumas, huesos y huevos de alcas gigantes, especialmente de los años entre 1830 y 1831. El Museo Americano de Historia Natural de Nueva York es uno de los que cuentan con una piel auténtica.
Actualmente quedan unos 75 huevos, 24 esqueletos completos y 81 pieles. También hay miles de huesos sueltos que se han recogido desde su extinción de la isla de Funk, de ejemplares de miles de años o de unas pocas décadas.


CARACTERÍSTICAS

Se trata de un ave Charadriiforme de la familia Alcidae. De entre ellas, fue el más grande de los pingüinos que han existido hasta que el hombre lo exterminó. Estas aves medían aproximadamente un metro de altura. Machos y hembras eran similares en plumaje y tamaño.

Estos pingüinos no podían volar, ya que se habían adaptado a la vida terrestre y a nadar; aun así sus alas aunque débiles y pequeñas, fuera de toda proporción con respecto al cuerpo, parecían todavía alas de ave.

Su plumaje era negro en las alas, la espalda y cuello; su cabeza era pardo oscura. A los lados de la cabeza tenía dos manchas blancas (pen gwyn significa ´cabeza blanca´ en gaélico); el abdomen también era blanco. Sus patas eran oscuras y palmeadas, y el pico, usado para arponear peces bajo el agua, era muy robusto, razón por la cual los escandinavos la conocían como geirfugl o garefowl, que significa ´ave lanza´ en castellano.
Realmente durante la temporada de cría era cuando tenían el parche blanco del ojo más grande; tras la temporada de cría el parche se convertía en una banda blanca y en una línea de color gris que se extendía desde el ojo al oído.

Vivían entre 20 y 25 años

El pingüino gigante estaba perfectamente adaptado a la vida acuática. Nadaba en superficie, sosteniendo su cuello vertical y su cabeza por encima del agua. A la más mínima alarma, buceaba y se ponía a salvo con una huida rápida.

Su grito era una especie de graznido breve aunque sonoro.

En tierra, el alca gigante se mantenía muy derecho y tenía aspecto altivo, aunque sus andares fuesen pesados y torpes. Las patas se encontraban muy atrás en el cuerpo para proporcionarle más potencia en el nado.

MIGRACIÓN: En otoño, nadaba hacia el sur, y volvía hacia el norte en la primavera. Durante el invierno, frecuentaba las costas europeas, descendiendo hasta España.

ALIMENTACIÓN: Los jóvenes se alimentaban de plancton y posiblemente al principio de pescado regurgitado por sus padres. Los adultos se alimentaban principalmente de pescados de entre 12 y 20 cm.

REPRODUCCIÓN: Se sabe que criaban solo en islas rocosas aisladas probablemente debido a su temprana extinción en zonas más accesibles a las personas.
Para criar formaban parejas que incubaban un único huevo extraordinariamente grande sobre los acantilados o las playas durante la época de reproducción. Estos huevos eran bellamente coloreados y moteados, y los ponían entre finales de mayo y principios de junio.
Ambos padres construían el nido en montículos realizados en parte con guano, aunque parece ser que en ocasiones los ponían en suelo desnudo; las colonias de alcas ponían los huevos muy próximos unos de otros.
Los huevos tenían una media de 12,4 cm de longitud y 7,6 cm de ancho en su punto más ancho. Eran de color blanco amarillento a ocre con un dibujo variable entre el negro, marrón o gris y líneas de puntos que a menudo se congregaban en una zona.
La pareja incubaba el huevo durante seis semanas hasta su eclosión. Tras su eclosión se turnaban para alimentarlo. Los polluelos estaban cubiertos de plumón gris al principio.
En dos o tres semanas tras su nacimiento abandonaban el nido para empezar a entrar en el agua.

DEPREDADORES: Los pocos depredadores naturales eran mamíferos marinos y aves de presa, no teniendo miedo a las personas, de lo cual se aprovechaban para atraparlas.


HÁBITAT Y ÁREA DE DISTRIBUCIÓN

Esta especie se encontraba difundida en la época romana a lo largo de las costas del Océano Atlántico, desde Florida a Groenlandia, Islandia, Escandinavia, Islas Británicas, Europa Occidental y Marruecos, viéndose también en todo el Mar Báltico y más raramente al oeste del Mar Mediterráneo. Más tarde fueron quedando restringidas a zonas cada vez más inaccesibles incluso en barco, hasta su completa extinción.


AMENAZAS

Fueron conducidos a la extinción por la caza para obtener sus plumas, carne y grasa, aunque los detalles no se conocen muy bien. Cuando se fueron haciendo más escasos, la captura de ejemplares por coleccionistas y museos seguramente le acercó más rápidamente a la extinción.


TAXONOMÍA

Reino: ANIMALIA

Filo: CHORDATA

Clase: AVES

Orden: CHARADRIIFORMES

Familia: ALCIDAE

Nombre científico del alca gigante: Pinguinus impennis

Autor de la especie: (Linnaeus, 1758)

Nombre común: Inglés: Great Auk



El pato del Labrador (Camptorhynchus labradorius) fue descubierto en 1789, y se extinguió en tan solo 89 años, ya que disminuyó drásticamente entre los años 1850 y 1870, y el último ejemplar confirmado se cazó en 1875, en Long Island, una isla de Nueva York.

Sin embargo, parece ser que es posible que el último ave de esta especie se viera el 12 de Diciembre de 1878 en Elmira, nueva York; en este caso el pato fue víctima de un joven que salió a cazar, y se convirtió en la cena de su familia. Lo que quedó de esta ave, se acabó perdiendo, por lo que en la actualidad no se ha podido confirmar este caso; además, esto convierte al ejemplar de 1875 en el último ejemplar conservado, y se encuentra en el Museo Nacional en Washington, Estados Unidos.

En total parece ser que quedan 54 ejemplares disecados en museos o colecciones, de los cuales 10 se conservan en el Museo Americano de Historia Natural en Nueva York




CARACTERÍSTICAS

Se sabe muy poco de la historia de vida de esta ave, debido a su rápida desaparición y a sus pocos estudios. Pocos ornitólogos hicieron observaciones de campo de estas aves, entre otras cosas porque sus zonas de nidificación eran remotas. Además, su número cayó tan rápido que pocos se dieron cuenta del problema real. Además la escasa literatura sobre esta especie ofrece muchas oportunidades para la confusión.

Sin embargo sí que se saben unas pocas cosas que nos pueden dar una idea acerca de ellos:

Estas aves seguramente nidificaban en bancos de arena y alrededor de las bahías, y en invierno, vivían en golfos, puertos y estuarios.

Era un ave acuática de colores blancos y negros y del tamaño de un ánade real.

El pico era casi tan largo como su cabeza.

Sus ojos eran pequeños, su cuello más bien corto y grueso, y su cuerpo compacto. Sus pies eran pequeños y fuertes. Las uñas de sus patas eran pequeñas, y ligeramente arqueadas, así como finas.

Su plumaje era denso y suave; las plumas de la cabeza y el cuello eran pequeñas, y sus alas eran cortas.

En el pico tenía un color azul grisáceo alrededor de los orificios nasales, una zona color naranja pálida, y el resto del pico era negro. Sus ojos eran de color rojizo ?a vellana, y sus patas de color azul grisáceo.

La cabeza y la mitad superior del cuello eran blancos, a excepción de una zona alargada negra en la parte superior de la cabeza y la nuca.

Seguidamente en el cuello tenía una línea negra a modo de collar. Esta mancha se extendía hasta la zona alta de la espalda, en la zona de los hombros. En parte del pecho, alas y espalda era de color blanco, y el resto del cuerpo era negro o marrón oscuro.

La hembra era más pequeña que el macho, con el pico, ojos y patas del mismo color. En cambio el color general de su plumaje era entre gris y marrón, más oscuro en la cabeza, mejillas, espalda, caderas y abdomen, y de un color más ligero, acercándose al gris ceniza, en la garganta, y algunas plumas de las alas. Tenía dos manchas blancas en las alas.

Comía pequeños moluscos, y la estructura de su pico estaba muy modificada en comparación con la mayoría de los patos, ya que tenían un ancho y aplanado pico con numerosas laminillas dentro. Su pico era más ancho al final que al principio, a modo de espátula. Para alimentarse parece ser que introducía su pico en zonas de arena y barro para sacar los moluscos.

No solía alejarse mucho del mar, a no ser que debido a las condiciones meteorológicas se le viera en zonas más del interior pero siempre cerca del río.

Su vuelo era rápido, y se le veía por lo general en bandadas de 7 a 10 aves, probablemente todos miembros de una misma familia.


HÁBITAT Y ÁREA DE DISTRIBUCIÓN

Habitaba en zonas de Canadá y Estados Unidos.

El pato labrador probablemente nidificaba a lo largo del Golfo de San Lorenzo (vasto golfo del este de Canadá que comunica con el océano Atlántico) y de la Costa de Labrador, en Canadá, aunque no se tiene muy claro si estas son las zonas que utilizaba. A invernar iba al sur de Nueva Escocia en Canadá y a la Bahía de Chesapeake (una ensenada del océano Atlántico, ubicada al este de Estados Unidos).


CAUSAS DE LA EXTINCIÓN

Se sabe muy poco de la historia de vida de esta ave, y las causas que llevaron a su extinción no se conocen bien.

La caza con armas de fuego y trampas en sus lugares de invernada fueron sin duda los factores que llevaron a estas aves a la extinción. Aun así, aunque se cazaban para comer, se les describía como aves de mal sabor, que se podrían con rapidez y de los que, por lo tanto, se obtenía poco beneficio en la venta. Como consecuencia, parece ser que no eran muy buscados por los cazadores para estos fines. Sin embargo, los huevos seguramente fueron cogidos de sus nidos en grandes cantidades, y puede ser que se les cazara pero no por alimento, si no para comerciar con sus plumas.

Otro posible factor en la extinción fue la disminución de mejillones y otros moluscos de los que se alimentaba este pato, debido al crecimiento de la población de personas y a la industria en la Costa Este de los Estados Unidos.

Algunos ornitólogos hablan de una epidemia mortal padecida por los últimos representantes de la especie, aunque esta idea no está muy generalizada. Lo cierto es que el pato del Labrador se ha llevado con él su secreto.

Por otro lado, es cierto que esta ave parece ser que nunca fue muy común y que posiblemente se trataba de una única colonia de nidificación, lo que la convirtió aún más vulnerable a las amenazas.

Debido a que también se le conocía como Pied Duck, un nombre que compartía con el Negrón Careto (Melanitta perspicillata) y con el porrón osculado (Bucephala clangula)), ha habido serias dificultades para interpretar los antiguos registros sobre la especie. Algo parecido ocurrió con quagga (Equus quagga quagga), que hasta tiempo después de estar extinguido no se supo debido a la confusión con su nombre. A esta ave también se le llamaba Skunk Duck


TAXONOMÍA

Reino: ANIMALIA

Filo: CHORDATA

Clase: AVES

Orden: ANSERIFORMES

Familia: ANATIDAE

Nombre científico del pato labrador : Camptorhynchus labradorius

Autor de la especie: (Gmelin, 1789)

Nombre común: Inglés: Labrador Duck

No hay comentarios:

Publicar un comentario